Es posible cambiarlo todo
La educación es un sistema autoorganizado, donde el aprendizaje es un fenómeno emergente. (Sugata Mitra)
Dejame que me sienta bien por publicar esto. Que lo disfrute a pata suelta. Que sienta que no estuve delirando cuando empujé el proyecto CICE, con el que ganamos el segundo premio en la categoría Comunidad del certamen Educar-Intel 2006… aunque el sistema educativo de Traslasierra ni se dio por enterado. Que no tenía intenciones ocultas cuando discutía con todo el mundo hasta el hartazgo argumentando contra el modo de implementar el proyecto OLPC, porque olía a proyecto económico… a desafío tecnológico… pero para proyecto educativo no le daba la talla…
Dejame que te cuente (limeña/o) que un día, trabajando en un curso (de esos que hacemos a puro pulmón y a los que el sistema oficial no quiere ni sentirles el aroma), gracias a Gabriela Sellart, mi compañera de trinchereadas durante muchos años, me encontré con un señor hindú, de quien nunca había tenido noticias. Que no habla de dietas cognitivas ni de saturación tecnológica o de nativos e inmigrantes digitales y proyectos 1 a 1… Lo que él dice es mucho más dramático: los buenos maestros no quieren ir justamente donde más se los necesita. Pero pensando la educación de otra manera, es posible cambiarlo todo.
Disfrutalo, que te va a remendar el alma!
El investigador en educación Sugata Mitra aborda uno de los mayores problemas de la educación: los mejores profesores y las mejores escuelas no están donde más se los necesita. En una serie de experimentos de la vida real yendo desde Nueva Delhi, pasando por Sudáfrica, hasta Italia, le dio a los niños acceso auto-supervisado a la web y vio resultados que podrían revolucionar cómo pensamos acerca de enseñanza.
Será un placer! 😀
Ya nos veremos. A esta altura es como si te conociera 😀
jajajaja! Salute Alvar! Aunque nunca nos hemos visto las caras personalmente, nos conocemos de aquella época, de aquellos fragores! Gracias por estas palabras!
Felicitaciones Daniel, tenés mucho caminado y mucho más por enseñarnos