Modelos

Hace unos días Fernanda Rubio me pidió que escribiera mis opiniones respecto a la relación actual entre educación y redes sociales y me dejó dos preguntas. Como siempre, cada vez que te peguntan, te están invitando a pensar cómo puntualizar. Sólo que esta vez se me ocurrió que podí­a ser interesante agregar la referencia a cómo es esta discusión en las grandes ligas. Empiezo con las preguntas de Feni:

1- En qué medida las redes sociales pueden ser aprovechadas en el ámbito educativo?

Si partimos de la idea de Pierre Bordieu, según la cual la escuela es donde se fabrican las personas y pensamos las redes sociales como ámbitos de inmersión y desempeño de personas, la respuesta parece más que obvia. Sin embargo, tal como los conocemos hoy probablemente ambos dispositivos no puedan intersectarse con facilidad. Hay obstáculos importantes que tienen que ver con la implementación, con el involucramiento. Para empezar, las redes sociales configuran un espacio de prácticas de lenguaje sin cuerpo, como dice Franco Ingrassia, y el dispositivo educativo hoy no podría contrapesar esa falta. La formación de la personalidad requiere la puesta en juego del cuerpo además del lenguaje. No somos lo uno sin lo otro.

Mirado desde las prácticas educativas, tampoco concuerdan los modelos de abordaje y apropiación. Mientras que la red, por su configuración, necesita un metaconocimiento que sostenga la autonomí­a, el sistema educativo actual sigue teniendo una estructura que privilegia la acumulación de conocimiento como recurso de poder y por lo tanto promueve la dependencia.

La participación en una red requiere un pensamiento con autonomí­a creciente, estrategias de aprendizaje probadas para cada actor, buenas definiciones de sentido y capacidad de riesgo para explorar y establecer lazos que vehiculicen el intercamio. En el sistema educativo lo social no está basado en el desempeño horizontal sino en el orden y el disciplinamiento, en la verticalidad.

Es un choque cultural fuerte, donde, con seguridad, no hay una sola manera de hacer las cosas. Todaví­a las condiciones de aprovechamiento hay que pensarlas punto por punto. En cada caso particular.

2- Desde la explosión de las Tics, cuánto se capitalizó en el ámbito educativo?

En la experiencia individual de muchos docentes, creo que se ha capitalizado bien. A los que se han incluido en las nuevas prácticas, se los ve participar en las redes sociales, intercambiando con pares y en plena producción. Es fácil advertir que manejan otras herramientas conceptuales, que aprovechan mejor la información disponible, que están involucrados en prácticas diferentes y eso modela en un pensamiento de otra calidad. Faltan más docentes en ese proceso, faltan más alumnos, falta el ingreso masivo de las instituciones, para empezar a inclinar el fiel de la balanza.

En lo institucional hay dificultades, mucho voluntarismo y poca comprensión del fenómeno global. Es un proceso interesante para seguir, aunque por ahora creo que la dinámica principal es de vaciamiento; cada vez hay más prácticas que se implementan extracurricularmente y por fuera de la instituciones. La tensión que genera la demanda de los pibes confrontando contra la rigidez institucional, por ahora parece estar contribuyendo al deterioro en la calidad de la gestión y en el espesor de la experiencia educativa para todos.

Google vs. Facebook

David Alvarez, @balhisay, rescata un artí­culo de George Siemens

donde plantea el futuro del aprendizaje como una oposición entre el modelo centrado en los contenidos, representado por los LMS, frente al modelo centrado en las redes sociales.

Allí­ Siemens, desde su blog Conectivismo, dice:

Google y Facebook son empresas muy diferentes. Google tiene sus raí­ces en el contenido “su objetivo explí­cito es organizar la información de los mundos. Facebook, en cambio, está socialmente impulsado con el objetivo de ayudar a conectar y compartir con la gente en su vida.

La distinción entre estos dos enfoques es importante para los educadores, ya que nos enfrentamos a una dicotomÍ­a similar en la forma de enfocar la enseñanza y el aprendizaje con tecnologí­a. Desde los primeros modelos de Google la información está considerada como una entidad de valor inherente. Como resultado, Google hizo del acceder a la información su principal prioridad, simplificando las ya desastrosas búsquedas de Yahoo

Sale al cruce nada menos que Martin Dougiamas, creador de Moodle (el LMS por antonomasia) y la discusión (que no deja de ser interesante para recorrerla) se pierde por los meandros de las promesas y las aseveraciones de quienes tienen, evidentemente, palabra pesada.

Está claro que los dos gigantes plantean, como lo dice David Alvarez, una dicotomí­a en términos que para nosotros resultan absolutamente especulativos: contenidos vs. conexiones. Como si fuera posible, en orden a la subjetividad, pensar estas cosas como elementos quí­micamente puros. En mi opinión, se trata de una falsa disyunción ya que en ningún punto considera las imbricaciones de la cultura en ese sistema de tensiones.

Si bien es cierto que para comprender necesitamos simplificar (contenidos), no es menos cierto que una parte importante del conocimiento es la perspectiva, y allí­ necesitamos pensar las conexiones.